Por ahora no se me ocurre nada que escribir, a pesar que tengo anotado los títulos de los próximos posts que escribiré, por ahora no es su momento.
Así que concluí que es mejor dejar fluir los sentimientos. Los sentimientos que están medios asustados y afligidos, a veces pienso que exagero, a veces pienso que esta bien hay momentos de momentos, a veces pienso que algo no esta bien y quiere salir y no sabe como. Y otras veces los olvido.
Pues estuve ordenando mis ideas separando las buenas de las malas, separando y despolvando recuerdos. Me puse a pensar y he concluido que guardo muchos recuerdos de antaño, sean buenos o malos. Los colecciono. Soy una coleccionista obsesiva compulsiva. Tengo muchos bellos y no tan buenos recuerdos, que sin embargo siguen ahí perenne. Entonces me digo ya es la hora, es el momento de desecharlos, no narrarlos, pero si escribirlo.
Entonces di con una sabia respuesta: Escribir. No debo de dejar esta oportunidad; escríbelo, públicalo y cumple tu sueño de ser escritora finalmente di mi conclusión.
Voy a escribir, lo sé. Y si a eso se le llama felicidad total me voy por ese camino.
A esto también va a dejar fluir tus palabras, tus acciones, tus espacios, tus sentimientos, déjalos que vayan como el viento de verano suave y fresco.
Como siempre suelo decir: Vistete bien, arréglate, alimentate lo necesario, date tu gustito. Porque la vida solo se vive una vez, todo se envejece, todo pasa, todo cambia, tomate una foto en su debido momento porque tu ya no seras el mismo de acá a diez años y diez años multiplicados por dos.
Señales vienen a mi y yo le presto atención.
Así que concluí que es mejor dejar fluir los sentimientos. Los sentimientos que están medios asustados y afligidos, a veces pienso que exagero, a veces pienso que esta bien hay momentos de momentos, a veces pienso que algo no esta bien y quiere salir y no sabe como. Y otras veces los olvido.
Pues estuve ordenando mis ideas separando las buenas de las malas, separando y despolvando recuerdos. Me puse a pensar y he concluido que guardo muchos recuerdos de antaño, sean buenos o malos. Los colecciono. Soy una coleccionista obsesiva compulsiva. Tengo muchos bellos y no tan buenos recuerdos, que sin embargo siguen ahí perenne. Entonces me digo ya es la hora, es el momento de desecharlos, no narrarlos, pero si escribirlo.
Entonces di con una sabia respuesta: Escribir. No debo de dejar esta oportunidad; escríbelo, públicalo y cumple tu sueño de ser escritora finalmente di mi conclusión.
Voy a escribir, lo sé. Y si a eso se le llama felicidad total me voy por ese camino.
A esto también va a dejar fluir tus palabras, tus acciones, tus espacios, tus sentimientos, déjalos que vayan como el viento de verano suave y fresco.
Como siempre suelo decir: Vistete bien, arréglate, alimentate lo necesario, date tu gustito. Porque la vida solo se vive una vez, todo se envejece, todo pasa, todo cambia, tomate una foto en su debido momento porque tu ya no seras el mismo de acá a diez años y diez años multiplicados por dos.
Señales vienen a mi y yo le presto atención.
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